Un Caso Filosófico

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  • August 30, 2018

Un Caso Filosófico

¿Tienen todos los seres humanos el mismo derecho a la vida o nos hacemos humanos en cierto punto, pero sólo valemos en virtud de alguna característica adquirida?

EL TDAD de Defensa de la Vida

Filosóficamente, no hay una diferencia moral significativa entre el embrión que fuiste una vez y el adulto que eres hoy. Así lo señala Stephen Schwarz usando el acrónimo TDAD: las diferencias de T amaño, los niveles de D esarrollo, el Ambiente, y el grado de D ependencia no son relevantes en la forma en que los defensores del aborto quieren que parezca.

T amaño: En efecto, los embriones son más pequeños que los recién nacidos y los adultos, ¿pero por qué sería es relevante? ¿Queremos realmente decir que la gente por ser más grande es más valiosa? Los hombres son usualmente más grandes que las mujeres, pero eso no significa que merecen tener más derechos. El tamaño no equivale al valor.

D esarrollo: Cierto, los embriones y los fetos son menos desarrollados que usted y yo. Pero de nuevo: ¿Por qué es esto relevante? Las niñas de cuatro años son menos desarrolladas que las de 14 años. ¿Deberían los niños mayores tener más derechos que sus hermanos menores? Algunas personas dicen que la percepción que tenemos de nosotros mismos nos hace más valiosos. Pero si eso es cierto, los recién nacidos no calificarían como seres humanos valiosos. Los bebés de seis semanas no poseen la capacidad inmediata para llevar a cabo todas las funciones mentales de un ser humano, de igual forma, las personas en estado de coma, o las personas dormidas, o los que sufren de Alzheimer.

A mbiente: Dónde estés no es un determinante de quién eres. ¿Cambias de valor cuando cruzas la calle o cuando das vuelta en la cama? Probablemente no, de igual forma ¿cómo puede el viaje del canal de nacimiento de ocho pulgadas cambiar de pronto la naturaleza esencial de un feto de de una masa de tejido sin valor a un valioso ser humano? Si los que no han nacidos no son ya humanos y valiosos, cambiarlos de lugar tampoco los haría.

D ependencia: Si la viabilidad concede el valor humano, entonces todos aquellos que dependen de la insulina o de medicamentos para los riñones no serían valiosos y podríamos matarlos. Los gemelos conjuntos que comparten el mismo tipo de sangre y sistemas del cuerpo tampoco tendrían el derecho a la vida.

En resumen, es mucho más razonable argumentar que aunque los seres humanos difieren inmensamente en cuanto a talentos, logros, y grados de desarrollo, aún así somos iguales (y valiosos) porque compartimos una naturaleza humana común. Los humanos tenemos valor simplemente por lo que somos, no por lo adquiramos o perdamos durante nuestra vida.

Abraham Lincoln levantó un punto similar con respecto a la esclavitud: Notar que cualquier argumento usado para descalificar a los negros como sujetos de derechos trabaja igual de bien para descalificar a muchos blancos.

Si dices “A” es blanco y “B” es negro. Y todo lo determina el color, entonces: ¿el más claro teniendo el derecho de esclavizar al más oscuro? Ten cuidado. De acuerdo a esta regla, serás un esclavo de aquel que conozcas con la piel más clara que tú.

“No te referías al color exactamente – ¿querías decir que los blancos son intelectualmente superiores a los negros y que por lo tanto tienen el derecho de esclavizarlos? Ten cuidado de nuevo: De acuerdo a esta regla te convertirías en esclavo del primer hombre que conozcas con un intelecto superior al tuyo”.

“Pero dices que es una cuestión de interés, y, si lo puedes hacer de tu interés, tienes el derecho de esclavizar a otra persona. Muy bien. Y si esa persona lo hace de su propio in interés, él tiene el derecho de esclavizarte a ti”.

Si los seres humanos tienen valor solamente porque han adquirido propiedades como el color de la piel, o conocimiento de sí mismos, y no en virtud de lo que realmente son; entonces el resultado es que como estas propiedades adquiridas vienen en grados variables, los derechos humanos básicos también vienen en grados variables. ¿Queremos realmente decir que aquellos con más conciencia de sí mismos son más humanos (y valiosos) que los que tienen menos? Como lo señalan Lee y George: esto nos lleva a la proposición de que todos los hombres son creados iguales al montón de cenizas de la historia.

Conclusión

Tristemente, los oponentes de los defensores de la vida creen que los seres humanos que están en el lugar equivocado, o que no tienen un nivel inferior de desarrollo no merecen la protección de las leyes. Ellos sostienen, sin justificación, la creencia de que las personas fuertes e independientes merecen la protección de las leyes, mientras que los pequeños y dependientes no. Este punto de vista es elitista y exclusivista y viola el principio que una vez hizo grande al liberalismo político: Un compromiso básico de proteger a los miembros más vulnerables de la comunidad humana.

Podemos hacer más que eso. En el pasado, acostumbrábamos a discriminar en base al color de la piel y al género, pero ahora, con el aborto por elección, discriminamos basándonos en el tamaño, el nivel de desarrollo, la ubicación y el grado de dependencia. Simplemente cambiamos una forma de intolerancia por otra.

En una clara oposición, la posición que he defendido es que ningún ser humano, independientemente de su tamaño, nivel de desarrollo, raza, género, o lugar de residencia, debe ser excluido de la comunidad moral de los seres humanos. En otras palabras, el punto de vista a favor de la vida es inclusivo, profundamente abierto a todos, especialmente a los que son más pequeños, vulnerables e indefensos.

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